Bueno, en un dia de esos de ocio en la escuela, una mujer estudiante de bioquimica se encontraba con nosotros (una
bola de sistematicos) cuando surgio el tema de los pedos, y bueno, tal vez no sea yo la mas indicada para platicarles esto pero, por fin ocurrio algo mas profudndo que solo burlas y lluvia de experiencias vergonzosas sobre incidentes que inmiscuyen gases malolientes producidos por nuestro organismo. Pues bien, la bioquimica se tomo la molestia de explicar por que ocurre
este tan magestuoso suceso que obtiene como resultado un gas mejor conocido como flatulencia:
Al comer frijoles (entre otros alimentos por supuesto, pero nuestra platica estuvo fijada alrededor de los frijoles) el estomago trata de digerirlos, pero en la corteza de los beans, existen fibras y otros compuestos propios del frijol que nuestro cuerpo no necesita. Cundo el estomago hace su trabajo, todos esos elementos no requeridos terminan en forma de gas que inevitablemente tienen que salir por algun lado. Desafortunademente para algunos y excelentemente para otros, estos gases pasan por
nuestro intestino, mismo que tiene materia no muy agradable, obteniendo asi el olor tan tipico de los gases cientificamente conocidos como PEDOS.
Cuando el cuerpo no lo soporta más, o simplemente cuando alguien quiere malvivir a los demas, suelta esta sustancia gaseosa que se expande por el sitio abarcando el mayor espacio posible hasta que las particulas estan tan separadas que el olor deja de ser perceptible, a saber, los gases tienen a llenar todo el recipiente que los contiene, en este caso, tu abitacion o el elevador, pero mientras las particulas se encuentran recien liberadas, el olor a veces fuertemente penetrante, hace llorar a mas de un par de ojitos.
Es recomendable alejar estos desechos de las flamas, puesto que puede provocar explosiones ligeras al hacer contacto con ellas.
Bueno, este flash informativo ha llegado a su fin, creo que ahora pensaran dos veces antes de soltar un soplado, al menos para recordar sus exitantes origenes.